Muchos estudios han demostrado en varias ocasiones que fumar durante la lactancia influye muchísimo en la alimentación y en el sueño de los bebés. De hecho, se ha confirmado que las mujeres que fuman dan el pecho durante menos tiempo que las que no fuman a pesar de la recomendación de los pediatras de procurar que la lactancia materna sea durante al menos 6 meses.


Fumar más de diez cigarrillos diarios afecta mucho a todo el proceso de lactancia, principalmente porque la producción de leche disminuye y su composición se ve alterada, perdiendo nutrientes y teniendo un sabor menos agradable.
Debido a todo lo anterior, los bebés lloran más durante la lactancia y tienen más cólicos. Estoy influye también en el sueño del bebé, que se ve alterado y la calidad del mismo es mucho peor, lo que le da a la madre un mayor estrés, posibilidades de sufrir una depresión y una calidad de vida mucho menor. Si es tu caso y te estás planteando volver a fumar mientras le das el pecho a tu niño, olvídalo, son solo unos meses y está muy claro que lo más importante en todo esto es que el niño pueda tener una calidad de vida como debe ser a su edad y poder dormir y comer tranquilo, algo que no hará si tu principal interés es fumar aunque esto suponga que el bebé pase por un mal trago durante el tiempo de lactancia.
Paloma: Muchas libertas, poco café… es algo desequilibrado. Habrá que remediarlo. Chanchibesos de nuez.