- Que esté situada en un local de uso exclusivo y con acceso desde el exterior, y debe contar con al menos tres aulas.
- Igualmente debe disponer de unas condiciones arquitectónicas que posibiliten el acceso y circulación a los alumnos con problemas físicos.
- Una sala por cada unidad con una superficie de dos metros cuadrados por puesto escolar, y que tendrá como mínimo treinta metros cuadrados.
- Además las aulas con alumnos de cero a dos años deben contar con áreas diferenciadas para el descanso e higiene del niño.
- También es imprescindible que cuente con un espacio adecuado para la preparación de alimentos, cuando haya niños menores de un año, con capacidad para los equipamientos correspondientes esta función.
- El centro debe disponer de una sala de usos múltiples de 30 metros cuadrados que, también puede ser usada como comedor.
- Del mismo modo, debe contar con un patio de juego por cada nueve aulas o fracción con una superficie superior a los 75 metros cuadrados.
- En cuanto a los aseos, debe existir al menos un aseo por aula, que tiene que ser visible y accesible desde la misma, equipado con, como mínimo, dos lavabos y dos inodoros.
- Y, por supuesto, debe contar con un aseo para el personal docente separado de los servicios de los niños, con un lavabo, un inodoro y una ducha.


Si ya has decidido que vas a llevar a tu hijo a una guardería te interesa saber qué requisitos deben cumplir éstas. Para no tener problemas, lo primero a tener en cuenta es que el centro que elegido posea, como mínimo, una autorización administrativa de funcionamiento, la cual le pude ser retirada si no cumple las condiciones mínimas exigidas en lo que se refiere a las características físicas y arquitectónicas; las instalaciones y el equipamiento; las condiciones higiénico-sanitarias y de seguridad, y la adecuación de las diferentes zonas del centro. Más allá de esta premisa básica, al visitar la guardería elegida hay que fijarse en los siguientes aspectos: