Hace ya algunos años que muchas madres primerizas empezaron a optar por dar el pecho a sus recién nacidos, en lugar de dar de comer a sus bebés a través del biberón, aunque en España, todavía, muchas mamás no llevan a cabo esta práctica debido, sobre todo, a la falta de información. ¿Por qué dar el pecho al bebé? Pues la respuesta es muy sencilla, la lactancia materna aporta grandes beneficios al bebé recién llegado.
Estos beneficios están relacionados tanto con el aspecto nutricional como con el ámbito psicológico y afectivo del recién nacido. El primer beneficio de la lactancia materna es que favorece el inicio de la relación entre la mamá y el bebé de manera positiva, es decir, el contacto de la piel de ambos aumenta la relación entre los dos y estimula la producción de la leche materna.
Además, la leche de mamá es perfecta para cubrir las necesidades nutricionales de los recién nacidos y evita que el bebé sufra determinadas infecciones ya que esta leche es rica en una serie de elementos que restan las posibilidades de infección.
A su vez, es capaz de encarnar un papel de prevención en materia de alergias y de obesidad, aumenta el desarrollo del sistema nervioso y, como decíamos anteriormente, permite establecer un vínculo especial entre vosotras y el recién nacido.
Pero no todo son ventajas para el bebé, sino que a vosotras también os aporta una serie de beneficios. La lactancia materna os protegerá de la posible aparición de tumores de pecho o de ovario. También refuerza vuestros huesos, de tal forma que pueden prevenirse enfermedades como la osteoporosis y os ayudará a mantener la línea después del parto.
Así que no dudéis en dar el pecho a vuestros bebés ya que los beneficios de la lactancia materna son diversos tanto para vosotras como para los recién nacidos.