

Existen cuatro importantes rutinas en la vida del bebé:
Comida
Es importante el tiempo que el bebé pasa comiendo, porque pronto aprenderá que cuando tiene hambre, lo alimentas, y si lo estás amamantando, tu producción de leche será más coherente si te atienes a una rutina regular.
Tan pronto como tu bebé muestra signos de hambre, siéntate en un lugar acogedor con música suave, si tu bebé se distrae con facilidad al amamantar, es posible que prefiera ir a una habitación más tranquila con las luces bajas, el sabrá entonces que es hora de comer ahora. No implicarse en otra tarea cuando estás dando de comer al bebé como ver la tele o mirar el correo, le estás diciendo que él es importante para ti.
Juegos
Incluso los bebés muy pequeños necesitan tiempo de juego durante el día, y tendrán un aprendizaje más seguro si el tiempo de juego se siente rutinario y familiar; esto es efectivo cuando el bebé esté alerta y activo. Trata de estimularle de forma suave y no dediques este tiempo a realizar otra acción.
Baño
La rutina de la hora del baño puede ser un despertar refrescante en la mañana o un preludio de una noche de sueño reparador; será el propio carácter del bebé, el que determine el mejor momento del día para tomar un baño. Mantén ese tiempo más o menos constante, y baña a tu bebé cuando no tengas prisa; háblale de forma suave y tranquilizadora, para que no se estrese.
Sueño
Conseguir acostar al bebé, es probablemente la rutina más importante del día y para ello debes de seguir la misma rutina noche tras noche; no dejes que tu bebé se canse demasiado, porque puede ser más difícil conseguir que se vaya a la cama y aprovecha los signos de sueño, para comenzar la rutina diaria del baño, un masaje y una luz tenue para que se quede dormido.
Fuente Imagen: anitapeppers/morguefile