Síntomas en la primera semana de embarazo
El 60% de las mujeres empieza a notar los síntomas de embarazo a partir de las tres primeras semanas de embarazo, mientras que un 90% de las mujeres lo apreciará al completar las primeras 8 semanas. La sintomatología más común en estos primeros días es la siguiente: -Puedes tener aversión a determinados alimentos como puede ser el olor a café, embutidos como el jamón y otro tipo de carnes rojas cuando son recalentadas. Este tipo de aversión se podría deber al aumento de los niveles de estrógeno en tu organismo. Esta sensación también se puede producir con los alimentos que más te gustaban. Y, es que, el sentido del olfato se desarrollará más de lo normal, haciendo que te vuelvas más sensible a determinados aromas. -Esta misma aversión provocará vómitos y náuseas durante estos primeros días. Estos síntomas serán frecuentes a primera hora de la mañana -Los cambios hormonales producidos durante los primeros días pueden hacer que te sientas hinchada, como sucede en algunas ocasiones antes de la llegada de tu período. Es posible que determinadas prendas de ropa se muestren ajustadas en la cintura. -La fatiga es otro de los síntomas más característicos. Es probable que este cansancio se deba al aumento de los niveles en la hormona progesterona. A esto hay que añadir como causantes las náuseas y despertarte frecuentemente por la noche para ir al servicio. -Los cambios hormonales que se producen en tu organismo también provocarán que circule mayor cantidad de sangre hacia los riñones, lo que hará que tu vejiga se llene más rápidamente y provocará que debas ir al baño con frecuencia. Los riñones deberán de procesar una gran cantidad de líquido adicional durante el embarazo. -La hinchazón y sensibilidad en los senos es otro de los cambios más característicos en la primera semana de embarazo. Este síntoma se aliviará a partir del primer trimestre. -El retraso en la menstruación es uno de los síntomas más claros de tu embarazo. Si tu ciclo menstrual es bastante regular y, de manera repentina se retrasa, recuerda hacerte la prueba del embarazo. Igualmente si aprecias que tu temperatura basal (al despertarte) permanece elevada por más de dos semanas consecutivas, es muy probable que estés embarazada.

El bebé durante la semana 1 de embarazo
Durante la primera semana de embarazo, el bebé experimentará, al igual que su madre, una serie de cambios: -El óvulo femenino se dividirá, justo un día después de ser fecundado por el espermatozoide. A partir de este momento, la división continúa hasta formar una especie de esfera denominada blastocisto, una célula embrionaria no diferenciada, que se empezará a formar antes de constituirse la etapa germinal. Durante los primeros cuatro días se pueden llegar a producir hasta más de 100 células. -Desde el quinto día las células empezarán a separarse en dos grupos. El primero grupo de células constituirá la placenta, que acogerá al bebé. El segundo grupo conforma el aro interior, son las conocidas como células madre y tienen la capacidad de transformarse en más de 200 clases de células de cualquier parte del cuerpo, las cuales, más adelante, se convertirán en embrión -Cuando transcurren los siete días de la semana, el óvulo fertilizado bajará por las trompas de Falopio hacia el útero, buscando de esta forma su lugar de implantación. -El intercambio de sustancias entre la madre y el hijo se produce a través de la barrera de la placenta, que es la que separará la sangre de la madre de la del feto, protegiéndole al mismo tiempo de virus y otras bacterias.Consejos para la primera semana de embarazo
Durante la primera semana de embarazo, es conveniente seguir algunos de estos consejos: -La visita al ginecólogo para confirmar la buena nueva es uno de los primeros pasos. En esta consulta inicial se realizará una prueba de ultrasonido transvaginal para confirmar el embarazo. Esta ecografía ayudará a descartar si se trata de un embarazo ectópico o si es único o múltiple simplemente. El médico también valorará tu estado de salud y el de tu pareja y determinar tu historial clínico. Igualmente, se realizarán análisis de sangre y orina para detectar situaciones de salud que podrían ser nocivas para el bebé. Además se realizaría una citología vaginal para descartar problemas graves de salud.
