

Cómo hacer que el bebé se duerma
Existen algunas prácticas que pueden ayudar a facilitar el sueño de los bebés e incrementar la calidad del mismo, entre ellos te destacamos los siguientes:
- Vigila la temperatura: El ambiente de la habitación resulta fundamental. Es importante que esté ventilado, y que la temperatura no sea agresiva. Lo más recomendable es que se sitúe entre los 22 y los 24 grados centígrados. Así mismo es importante que la ropa de cuna del bebé sea la adecuada.
- Crea hábitos: El cerebro de los bebés empieza a asimilar rutinas y reglas de causa-consecuencia. Por eso es tan recomendable implementar una rutina a la hora de ir a dormir. Poco a poco irá comprendiendo cuándo ha llegado la hora de descansar y esto le generará una sensación de seguridad muy importante. Al poder relajarse más fácilmente podrá dormirse mucho antes.
- La hora del baño: El ritual del baño puede ser una buena alternativa para inducir a la relajación. El contacto con el agua caliente antes de ir a dormir le ayudará a desconectar de una forma más rápida.
- El masaje como forma de relajación: El cariño y las caricias pueden fortalecer esa sensación de protección y seguridad. Adquirir la rutina de hacerle masajes faciales es sin duda una de las opciones más efectivas para inducirle al sueño.
- Tus brazos: Al tomarlo en brazos y mecerle se acompasan sus ritmos naturales como la respiración o el latido del corazón. Esto tiene efectos muy positivos y les incita poderosamente al sueño. Pero tampoco abuses de esto, porque si se acostumbra demasiado después sólo querrá que le cojas para dormirse
- Cántale: Cuando cantamos liberamos endorfinas y generamos una sensación de serenidad. Este estado lo experimenta tanto la persona que canta como aquella que escucha. Este es uno de los motivos por los que las canciones infantiles son tan recomendables a la hora de ir a dormir.
- La succión es importante: Los bebés experimentan satisfacción chupando. Cuando se desvelan a mitad de la noche es recomendable ofrecerles un biberón, un chupete o el pecho. Esto les ayudará a relajarse y dormirse rápidamente.
Lo normal es que según vaya creciendo cada vez duerma mejor y este problema desaparezca, sin embargo si persiste no está de más que le lleves al pediatra para descartar posibles complicaciones.