Para evitar la acidez deberás alejarte de aquellos alimentos, cuya composición puede llegar a ser irritante para la mucosa gástrica. Entre ellos encontramos a los cítricos (kiwi, naranja, pomelo, limón), comidas fritas, comidas grasosas, chocolate, alcohol, cafeína, dulces y exceso de azúcar, verduras de hojas crudas, comidas demasiado calientes.
Pero existen otros puntos, como conductas a seguir, que podemos tener presentes:
-Trata de no aumentar de peso mucho más de lo que te aconseja tu médico.
-En el mercado existen diferentes productos para disminuir la sensación de quemazón, pero no debes tomarlos sin previa autorización de tu médico, lo mejor es tomar un vaso de leche fría o apenas tibia, consume pan blanco apenas tostado, frutas sin fibras y sin cáscaras, preferentemente cocidas.
-No ingieras alimentos o bebidas que causen malestar gastrointestinal (entre ellos el alcohol, gaseosas, chocolate, tomate, condimentos, vinagres, salsas, carnes, café).
-Es preferible tomar pequeñas porciones de comidas y comerlas más seguidos, siempre come lentamente y masticando bien cada bocado.
-Bebe por los menos dos litros de agua por día, pero evita hacerlo durante la comida, ya que además de acidez pueden causarte una gran hinchazón.
-Consume goma de mascar después de las comidas, así se estimularán las glándulas salivales, recuerda que la saliva se encarga de neutralizar el ácido.
-Deja pasar dos horas entre comer e ir a acostarte, cuando lo hagas puedes dormir acostada sobre varias almohadas o una almohada especial con forma de cuña. Cuando eleves la parte superior del cuerpo al estar recostada, generarás que los ácidos estomacales permanezcan en su sitio y así se facilite la digestión.
Usa indumentaria holgada y cómoda, que no apriete ni tu cintura ni tu vientre. No fumes ni bebas alcohol.
Foto | Flickr