También debes evitar el consumo de carbohidratos y optar por una dieta rica en suplementos minerales, es una forma de elevar los niveles de estrógeno. Una buena opción es agregar proteínas y zinc.
Deberás beber por lo menos dos tazas de té de hierbabuena, si bien esta infusión es muy natural antes de comenzar a consumirla deberás preguntarle a tu médico. Otros buenos aliados para incrementar la cantidad de estrógenos son el anís, el hinojo, frambuesa, salvia, hierba tora, raíz de ñame.
Para alcanzar una buena producción de estrógenos será necesario que tu sistema endocrino esté equilibrado y en armonía, una buena forma de llegar a este punto ideal es practicando una disciplina como el yoga.
Evita el consumo de huevos, carnes no orgánicas, leche y pollo. Utiliza semillas de lino molidas para condimentar tus alimentos o agregarlas en un yogur batido.
Los estrógenos son hormonas sexuales esteroideas (derivadas del ciclopentanoperhidrofenantreno), producidas por los ovarios y en menor medida por las glándulas adrenales.
Los estrógenos tienen la capacidad de atravesar la membrana celular para poder llegar al núcleo, el que se encarga de activar o desactivar algunos genes, ayudando a sintetizar las proteínas.
Mediante los estrógenos se inducen a fenómenos de proliferación celular sobre los órganos, principalmente endometrio y el mismo ovario. Cuentan con un efecto preventivo de enfermedades cerebrovasculares, trabajan en conjunto con los gestágenos (otra hormona sexual femenina). Los estrógenos presentan su mayor concentración durante la primera semana de la menstruación.
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