

Cómo es la Dieta de la zona
Llevar a cabo la dieta de la zona es bastante simple, cada comida debe de ser dividida en tres partes, dos terceras partes la deben de constituir una variedad de carbohidratos de baja carga glicémica como frutas ricas en polifenoles y verduras, y el tercio restante debe estar conformado por una fuente de proteína magra, como carne de ternera baja en grasa, pollo, pavo, incluso claras de huevo.
Cada comida debe contener una pequeña parte de grasa no saturada proveniente de fuentes como los aguacates, almendras o aceite de oliva virgen, los cuáles aportan grasas saludables y ácidos grasos Omega-3, como el aceite de pescado y los suplementos necesarios en cada caso.


Beneficios de la dieta de la zona en el embarazo
La dieta de la zona es recomendable para las mujeres embarazadas, siempre y cuando se cumplan con dos condiciones simples.
- Todas las mujeres embarazadas deben aumentar su ingesta total de alimentos en aproximadamente 1200 calorías por día para cumplir con las crecientes demandas de embarazo.
- Las madres que están amamantando deben aumentar su ingesta diaria de calorías aún más que aquellas que están gestando.
La dieta de la zona aporta los nutrientes necesarios para que se desarrolle el bebé en condiciones óptimas.
Pierde el exceso de grasa corporal.
Mantiene la inflamación silenciosa bajo control, y que puede producir por enfermedades como enfermedad cardiovascular, cáncer, artritis y Alzheimer.
Es la mejor opción para llevar un control de peso y hormonal, debido al equilibrio de los icosanoides, que son un grupo de moléculas de carácter lipídico.
Es una dieta que no produce ansiedad por la comida.
La dieta de la zona en el embarazo disminuye en gran manera la retención de líquidos, y mantiene estables tus niveles de azúcar .