

Muchos miedos infantiles se encuentran entre lo racional y lo irracional, y se producen en las fases en que el niño se expone a nuevas experiencias y que desarrollan el razonamiento cognitivo y la capacidad de imaginación. Si el miedo de un niño se considera normal, depende de su edad y de cuanto interfiere con sus actividades diarias.
El miedo según la edad del niño
Según la edad del niño, los miedos son diferentes, y temen a distintas cosas.
Los pequeños bebés tienen miedo a caerse y a los ruidos fuertes; así como miedo a los extraños, que sucede entre los siete a nueve meses y puede durar hasta los 18 meses, cuando comienza a disminuir, muestran signos de llanto, rigidez, y agitación.
Los bebés mayores temen a los extraños, animales, insectos, tormentas, sirenas, objetos de gran tamaño, colores oscuros, oscuridad, gente con máscaras, monstruos y personas malas, como los ladrones, así como miedo por separarse de sus padres y muestran signos de llanto y evitan a la persona u objeto temido.


Los niños en edad preescolar temen ser separados de sus padres, dormir solos, y tienen temor de las figuras imaginarias, como fantasmas, monstruos y seres sobrenaturales. Se pueden ver síntomas físicos, como dolor de estómago o de cabeza.
En niños más mayores en edad escolar, los miedos incluyen ansiedad por separación, miedo a la muerte, a la violencia, a la guerra, al asesinato, secuestro y lesiones físicas, y a los desastres naturales, como inundaciones o terremotos.
Terapias para tratar el miedo
Cuando los miedos de los niños persisten más allá de la edad apropiada, pueden interferir con su vida cotidiana, por lo que es conveniente que los padres de estos niños que sufren algún tipo de fobia o miedo irracional, deben acudir con su hijo a un psicólogo.
Existen varios tipos de terapias para tratar el miedo en los niños
TERAPIA DE COMPORTAMIENTO
El tratamiento más eficaz para tratar las fobias, es la terapia de comportamiento, que se aproxima a la fobia como un comportamiento no deseado. A menudo toma la forma de desensibilización, una técnica mediante la cual el niño se expone al estímulo temido de forma muy suave y luego gradualmente se va aumentando de intensidad.


Un ejemplo claro es un niño que teme a los perros; primero se le pedirá que vea fotos de perros, luego, jugar con un perro de peluche y más tarde que se coloque a una distancia de un perro, para que al final sea capaz de acariciar y jugar con los perros.
VISUALIZACIÓN CREATIVA
Antes, durante y después de la exposición a la fuente de miedo, el niño puede empezar a imaginar que puede controlar su miedo y sus propias reacciones de otras formas, mediante la visualización creativa, como imaginar que el niño posee un interruptor que puede usar para controlar su miedo cada vez que se visita al médico o el dentista, y en ocasiones puede resultar eficaz.
TERAPIA CON MEDICAMENTOS
En las fobias también puede ser necesario el tratamiento con medicamentos, como los fármacos para la ansiedad y los inhibidores de la recaptación de serotonina. Esta medicación es especialmente útil para tratar la fobia social, que puede ayudar al niño a superar su aversión a la interacción social.
TRATAMIENTO COGNITIVO-CONDUCTUAL
Cuando esta aversión se acompaña de ataques de pánico, será necesario aplicar un tratamiento cognitivo-conductual para tratar el trastorno de pánico.
Fuente Imagen 1: JavCarCiv/flickr