La oxiuriasis es una tipo de infección parasitaria muy frecuente en los más pequeños de la familia, sobre todo en los que están en edad de guardería y primeros años del colegio. Un parásito llamado Oxiuros la provoca aunque también es conocido como Enterobius Vermicularis. Solo los seres humanos somos los únicos huéspedes de estos parásitos.
El oxiuro se contagia por medio de los huevos de las larvas que son ingeridos o inhalados. Puede pasar que un niño con las manos sucias cuando se las lleva a la boca se contagie, empezando la diseminación del parásito. Otro lugar frecuente para contagiarse es en las piscinas o en el agua.
Los síntomas de la oxiuriasis provocan mucha irritación, se notará un prurito cerca del ano manifestándose por una fuerte picazón en el pene. En las niñas el parásito puede migrar a la vagina, causando una vulvovaginitis.
Para detectarlo se debe realizar un análisis de la materia fecal, donde se verán los huevos o las lombrices. El tratamiento deberá ser realizado por un médico, ya que posiblemente se caiga en reinfecciones.
La giardiasis es una infección con diarrea que es provocada por el parásito Giardia lamblia. Este se contagia por contacto fecal u oral o por medio del agua contaminada mediante las heces. Suele verse este tipo de parasitosis en zonas donde los suministros de agua están contaminados por heces de animales o humanos.
Al ingerir el agua contaminada, los ácidos del estómago activan las quistes y se liberan los trofozoos. Los síntomas que se pueden ver normalmente son: pérdida de apetito, dolor estomacal, cansancio, gases, diarrea...
Para detectar la enfermedad se realiza un examen parasicológico.
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