

Evita la carne poco hecha, ya que, puede ser portadora de un parásito causante del atoxoplasmosis, que sólo se destruye con temperaturas elevadas. Tampoco te excedas con el hígado porque en él, se concentran muchas sustancias químicas , así que es mejor evitarlo, al igual que los patés.
Debes de saber que la carne cruda y los quesos blandos, que han sido elaborados tradicionalmente y que no se encuentran pasteurizados, pueden ser causantes de la listeriosis, la cual, resulta muy grave para el bebé. Las frutas y verduras también pueden ser una fuente de contagio, por lo cual, es necesario que peles bien la fruta y en el caso de que la comas con piel, sumérgelas en agua con un producto apto para la desinfección alimentaria.
Elimina los embutidos de tu dieta o cómelos muy esporádicamente, elige jamón cocido, jamón de pavo o jamón ibérico; en cuanto al pescado, no debes de comerlo crudo, evita el sushi, los pescados ahumados y algunos mariscos como las ostras y todo aquel que se encuentre crudo porque pueden presentar anisakis. La anisakis sólo se destruye con la congelación, por lo que siempre, el pescado debe de estar antes de consumir, congelado.
No consumas bebidas carbonatadas, sólo aportan azúcar y aditivos, que son calorías vacías que se transforman en kilos de más y la cafeína que se presenta en los refrescos, café o té, puede producir consecuencias graves como: el bajo peso del bebé al nacer o el aborto espontáneo, además de, dificultar la absorción del hierro.
Muy importante es no tomar alcohol , ni tabaco durante el embarazo, ya que su consumo, dificulta la absorción de vitaminas del grupo B , entre los males menores, pudiendo dar lugar a : abortos, partos prematuros y bajo peso al nacer.
Imagen de: radio,rpp